domingo, 14 de julio de 2013

La ligereza sobre los hombros, el pensamiento despejado, algunos recuerdos que descansan en un lugar sin luz, esperando a que seas capaz de mirarlos sin cegarte. No siempre cerrar maletas significa cerrar etapas pero a veces sucede que lo que espera más allá de las terminales de aeropuertos alberga un futuro hasta entonces insospechado. Puedes extender las manos e intentar abarcarlo, pero siempre, siempre, excederá tu capacidad. Sin embargo, te permitirá también percibir la esperanza que queda justo al otro lado, atisbar el cese de tantas cosas que hoy por hoy es imposible que nombres sin vértigo. Te brindará la oportunidad de curar, de crear, de contemplarte sin tanto barro en los zapatos para marchar sin peso. Entonces, en ese único punto, cerrar maletas sí significará cerrar etapas y habrá algunas en las que convendrá tirar para siempre la llave del candado.


Fotografía de Alfredo Gómez



lunes, 8 de julio de 2013

Sucede que

NO HAY NADIE, ponía en el caparazón.
-¿Cómo puede ser?- los labios de Momo temblaban-. No puede haber desaparecido todo; todo lo que había...
Lentamente apareció en la espalda de Casiopea:
SE FUE.
Por primera vez en su vida, Momo entendía lo que eso significaba. Se sintió más triste que nunca.
-Pero yo -murmuró atónita-, estoy yo.
Habría llorado, pero no podía.
Al cabo de un rato se dio cuenta de que la tortuga le tocaba el pie descalzo.
YO ESTOY CONTIGO, ponía en el caparazón.

Momo, Michael Ende

sábado, 6 de julio de 2013

.

morimos uno a uno
sin saber que todo está muriendo (...).

Tabula rasa,
Nuria Ruiz de Viñasperre y Ana Martín Puigpelat